9 Ejemplos de Capitalismo: Características y tipos
El capitalismo es un sistema económico y social basado en los supuestos de que los medios de producción deben ser de propiedad privada. Así mismo, que el mercado es un mecanismo eficiente para asignar recursos escasos y que el capital es la fuente de creación de valor.
Conceptualmente, esta posición económica y social es lo contrario del socialismo.
El sistema capitalista se basa esencialmente en la propiedad privada de los medios de producción. Esto significa que debe pertenecer al individuo y no a una organización como el Estado.
El objetivo de la economía es encontrar formas de satisfacer las necesidades de las personas con recursos limitados, y el capitalismo cree que el mercado es el mejor mecanismo para lograrlo. Por eso creen que la propiedad privada y el fomento de la competencia son esenciales.
Los principales componentes de la producción son el trabajo y el capital. El capitalismo supone que el trabajo se proporciona a cambio de un salario monetario y que los trabajadores son de libre disposición.
La actividad económica se organiza de manera que quienes organizan los medios de producción puedan obtener beneficios económicos y aumentar su capital. Los bienes y servicios se distribuyen mediante mecanismos de mercado que fomentan la competencia entre organizaciones.
Se puede crear riqueza aumentando el capital mediante la inversión. Cuando las personas persiguen sus intereses económicos y compiten en el mercado, el bienestar aumenta. A medida que aumenta la riqueza, también lo hacen los recursos disponibles para utilizarla.
Los orígenes del capitalismo
El capitalismo, o la «economía libre«, existe desde la época de las culturas prehistóricas. Sin embargo, apareció por primera vez en el continente europeo en el siglo XIII como alternativa al sistema socioeconómico medieval del feudalismo.
Antes de la aparición del capitalismo como sistema económico, el trabajo era esencialmente una condición de servidumbre, esclavitud y obligación moral social. Antes, el capitalismo exigía que el trabajo se realizara a cambio de un salario y que los trabajadores fueran tratados como asalariados y no como esclavos.
Ejemplos de capitalismo
- Estados Unidos de América es un país con una fuerte imagen capitalista. Especialmente durante la Guerra Fría, se consideraba lo contrario a la Unión Soviética y su sistema comunista.
- Otro país capitalista es China, que ha decidido abrir el comercio a pesar de tener un sistema de partidos políticamente excluyente.
- En un sentido microeconómico, el capitalismo puede considerarse como un mercado en el que el Estado no interfiere en la determinación de los costes de las organizaciones y las relaciones de producción.
- Acuerdos de libre comercio como el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
- La propiedad privada, como los fondos de capital privado en las agrupaciones tecnológicas.
- Las empresas como forma típica de organización privada monumental de libre mercado.
- Las maquiladoras, que reducen su estructura de precios mediante la subcontratación de servicios a diferentes organizaciones.
- La globalización como elemento de entrada al mercado.
- Trabajos Múltiples S.A. de C.V., es una empresa que tiene que crear profesiones y tomar decisiones dentro de la empresa. Para celebrar elecciones, es necesario celebrar una junta de accionistas en la que los capitalistas con mayor participación en la empresa deben celebrar elecciones.
Estamos hablando de un sistema capitalista en el que los que tienen más capital pueden elegir entre los demás.
Tipos de capitalismo
El capitalismo puede clasificarse de la siguiente manera:
Mercantilismo
El mercantilismo es la idea, desarrollada en el continente europeo en los siglos XVI y XVIII, de que cuanta más riqueza acumule una nación, más próspera y exitosa será. Por tanto, es necesario mantener una balanza comercial positiva, en la que las exportaciones superen a las importaciones.
Mercado libre
Este sistema capitalista, también conocido como economía de mercado, se caracteriza por el hecho de que el precio de los bienes y servicios está determinado por la oferta y la demanda. Por lo tanto, no hay intermediación del Estado ni de terceros.
Economía social de mercado
En una economía social de mercado, la participación del Estado en la economía es mínima. Pero los servicios básicos y esenciales, como la seguridad social, los derechos laborales y la educación, son proporcionados por el Estado o mediante acuerdos.
En una economía social de mercado, la gran mayoría de las organizaciones son de propiedad y gestión privadas. Esta forma de capitalismo es la más común hoy en día.
Capitalismo empresarial
En este tipo de capitalismo burocrático y jerárquico, la esfera pública (el Estado) interviene en el mercado sólo para apoyar y promover los intereses empresariales.
Así, bajo el capitalismo corporativo, el papel del Estado es eliminar las barreras a la competencia y subvencionar a las empresas para promover la economía regional.
Economías mixtas
En una economía mixta, la participación pública se combina con un mercado de oferta y demanda.
En esta forma de capitalismo, el Estado está más implicado. El Estado garantiza el acceso de la población a los recursos esenciales. La economía mixta es también un sistema muy común hoy en día.
Ejemplos de países capitalistas
Algunos de los países donde se aplica actualmente el sistema capitalista son los siguientes:
- Alemania
- Bélgica
- Estados Unidos de América
- Francia
- Países Bajos
- Inglaterra
- Italia
- Japón
- Sudáfrica
- Suecia
Pilares del capitalismo
Los fundamentos básicos del capitalismo se basan en los siguientes pilares:
- La propiedad privada, en la que las organizaciones y los hogares son propietarios de todo tipo de activos: tangibles, intangibles y financieros.
- El egoísmo, donde cada uno actúa en su propio interés y donde este egoísmo tiene como objetivo una economía eficiente y sana para que cada uno pueda alcanzar sus propios objetivos.
- Mercado libre: mercado en el que los costes se determinan por la satisfacción de la oferta y la demanda sin interferencias externas.
- Competencia: la competencia significa que las empresas son libres de entrar y salir del mercado y deben competir para hacer más eficiente su negocio ofreciendo sus productos a los consumidores.
- Libre elección: la elección independiente significa que el cliente puede elegir entre poner un producto en el mercado o comprarlo en otro lugar, y el productor también puede producir de forma fiable y ofrecer un producto u otro de forma independiente.
- Limitación de la intervención pública. Al limitar la participación de la población, el Estado se limita a la producción de normas primarias y no participa en el mercado.
La situación actual del capitalismo
Allí donde el sistema de libre mercado ha sobrevivido, la situación ha cambiado y el capitalismo sigue existiendo. Pero, los medios de producción siguen estando en manos de los individuos.
Mientras que todas las personas, organizaciones y clientes siguen dependiendo del Estado para satisfacer las necesidades básicas de la población y garantizar que servicios como la sanidad, la educación y la provisión de necesidades sociales básicas estén al alcance de todos.
Sin embargo, todos los individuos, organizaciones y clientes están más o menos agobiados por un Estado práctico que está sujeto a restricciones financieras básicas. Y así poder garantizar que el Estado satisface las necesidades básicas de la población y pone a disposición de todos servicios como la asistencia sanitaria, la educación y las necesidades sociales básicas.
En otras palabras, lo que tenemos ahora no es una economía puramente de libre mercado, sino una economía mixta. Entre los sistemas capitalista y socialista, con un mercado libre pero un Estado.
El sistema capitalista se aplica en diversos grados:
- En Estados Unidos, el libre mercado está tan arraigado que prácticamente todo -no sólo los medios de producción, sino también las actividades sociales, culturales y de investigación- se deja a las ideas privadas. Y no hay garantías comunes, por ejemplo, en el ámbito de la sanidad.
- En los países del Estado de confort de Europa existe un sistema de producción capitalista. Pero el Estado conserva la producción de ciertos bienes y, sobre todo, garantiza a la población un nivel de vida mínimo en ámbitos como la sanidad y la educación.
- En China, han pasado de una economía dirigida marxista a un capitalismo casi bárbaro.
- Sin embargo, los países subdesarrollados y en vías de desarrollo con sistemas diferentes no pueden imaginar cómo serían si alcanzaran ese desarrollo económico.
Características del capitalismo
El capitalismo se define como un sistema basado en la propiedad privada de los medios de producción, el libre mercado y el crecimiento del capital.
Desde su plena implantación en el siglo XIX a través de la Revolución Industrial, el capitalismo ha adoptado diversas formas en diferentes circunstancias históricas. Sin embargo, a pesar de la variedad de formas de expresión, todos los modelos comparten características básicas. Estos son:
- Se refiere y defiende la propiedad privada de los medios de producción.
- El capital es el objetivo final
- Crear clases socioeconómicas específicas
- Promover la movilidad social
- Proteger la independencia de las organizaciones y la sociedad
- Promover el libre mercado
- Basado en la ley de la oferta y la demanda
- Promover la competencia
- Permitir que los trabajadores sean independientes
- Aboga por una mínima intervención del Estado
La propiedad privada de los medios de producción está en el corazón del capitalismo e implica el derecho del propietario a utilizar los medios a su disposición para obtener un beneficio económico.
Para el capitalismo, esto significa el derecho a garantizar tanto el crecimiento económico de los individuos y la sociedad como la eficacia de las instituciones y la independencia de los ciudadanos.
La propiedad privada de los medios de producción otorga a las personas la condición de propietarios, inversores y productores y puede sustituir al poder político, equilibrando el poder de la sociedad civil y del Estado.
La finalidad y el objetivo del capitalismo es acumular riqueza y capital mediante un uso rentable. Esto significa enriquecer tanto a los individuos como a las organizaciones empresariales.
La política gubernamental debe garantizar siempre un equilibrio favorable entre las clases sociales para conseguir una mejora económica para el conjunto de la sociedad.
El capital de los empresarios, de los inversores y de los accionistas no procede de los salarios, sino de la productividad de la empresa. Es decir, del beneficio que queda después de haber pagado todas las deudas que a menudo se contraen, incluidos los salarios de los trabajadores.
Los inversores y accionistas también se benefician de los instrumentos financieros, como los bonos, los pagarés y los intereses.
La sociedad capitalista está formada por la burguesía (clases alta, media y baja), el proletariado y el campesinado. La burguesía controla los medios de producción, los medios de comunicación, la tierra, la banca y las finanzas. Es esta clase la que genera rentas por la explotación de los medios de producción que posee.
La clase media tiene acceso a puestos administrativos, profesionales e intelectuales. La pequeña burguesía es un sector de pequeños artesanos, comerciantes, burócratas y empresarios de bajo nivel.
Las clases medias y bajas pueden tener sus propios medios de producción, pero mientras no tengan trabajadores, no se les considera explotadores. Por lo tanto, es característico de las empresas comerciales y artesanales.
El proletariado está formado por la clase obrera (trabajadores no cualificados) del sector industrial y, por último, el campesinado dedicado a la producción rural.
Antes del capitalismo, las personas que nacían en una determinada posición social debían mantenerla durante toda su vida. El capitalismo, a diferencia de otros modelos económicos como el feudalismo, la esclavitud y el totalitarismo, ofrece la posibilidad de movilidad social.
Esto significa que las personas, independientemente de su origen, pueden ascender socialmente con el crecimiento del capital.
El capitalismo utiliza la propiedad de los medios de producción para defender y practicar la independencia de las organizaciones, independientemente de sus productos o servicios.
Esto incluye la inversión en la empresa privada independiente y la gestión independiente. Incluye el derecho a elegir dónde trabajar, a invertir los fondos de forma independiente, a obtener ingresos y, si es necesario, a abandonar el negocio.
Para los capitalistas, la independencia del mercado, es decir, su independencia de la formación de los precios y de los costes de cambio según las leyes de la oferta y la demanda, es una condición fundamental para la eficacia del modelo capitalista.
Por lo tanto, se oponen activamente a cualquier regulación de los costes o injerencia del Estado, capitalista o no.
El modelo capitalista crea bienes y servicios, que a su vez crean demanda y oferta, de las que se derivan los costes.
El coste o el precio de cambio de los bienes y servicios surge porque cambian con el uso. La disponibilidad del objeto de intercambio (el coste de utilizarlo), es decir, la relación entre el número de bienes o servicios ofrecidos y el número de bienes o servicios demandados por el cliente, también afecta al coste o precio del intercambio
Así, cuanto más limitado sea el producto estándar, más alto será su precio.
En un sistema capitalista regido por la ley de la oferta y la demanda, los productores compiten entre sí para atraer la atención del mercado y maximizar los beneficios. La competencia conduce a servicios y productos más baratos y mejores, lo que constituye un elemento de crecimiento económico.
El crecimiento del capital depende de la producción a gran escala de bienes y servicios de consumo. El empleo de trabajadores (obreros, técnicos, gestores) es un requisito esencial para lograr este objetivo.
La relación entre el inversor (capitalista) y el trabajador se determina de forma independiente. Esto significa que los trabajadores pueden decidir por sí mismos si aceptan un trabajo en función de sus intereses, tareas y capacidades
Si lo hacen, pueden recibir un salario básico por sus servicios, lo que les libera de la esclavitud y aumenta su movilidad social.
En el capitalismo, el Estado no debe interferir directamente en la economía, ya que esto impediría un crecimiento económico adecuado. En la corriente capitalista, esta posición va desde una modesta cooperación, limitada al arbitraje entre los actores sociales y a la gestión adecuada de los recursos derivados de la producción privada, hasta la eliminación total de la intervención estatal.
Una economía capitalista se caracteriza principalmente por las organizaciones y los individuos que producen bienes y servicios en el mercado mediante transacciones económicas e intercambios a un precio determinado.
Por lo tanto, es el individuo quien genera ideas económicas y toma decisiones a través de iniciativas empresariales y financieras.
Lo contrario del capitalismo en cuanto a los derechos de propiedad privada es el socialismo. El cual, en la práctica, se adhiere al concepto de propiedad social de los medios de producción y los bienes.
De esta preservación de la propiedad privada se derivan las demás características del capitalismo. Es decir, la preservación del interés propio, el sistema de costes y la realidad de la competencia en el mercado.
A lo largo de los años, la posición socialista ha evolucionado desde los supuestos clásicos hasta una actitud más abierta y favorable al libre comercio. Bajo ciertas condiciones simples, por ejemplo, el Estado controla los asuntos económicos y financieros y protege a la población para evitar las desigualdades sociales y los abusos. Existe un sistema económico mixto llamado socialismo de mercado o socialdemocracia.
El capitalismo y el socialismo son sistemas económicos muy diferentes.
En el capitalismo, la producción se lleva a cabo a través de empresas privadas y organizaciones no gubernamentales.
Mientras que en el socialismo el sistema ayuda a abordar las desigualdades sociales. Esto, a través de programas diseñados para corregir los desequilibrios económicos y proteger a los económicamente desfavorecidos.
En resumen, el capitalismo se basa en la independencia del mercado. Mientras que el socialismo aboga por una mayor y más precisa participación del Estado en el mercado.
Sin embargo, como el capitalismo se basa en el trabajo independiente para obtener los ingresos. El ideal final es que quien menos trabaja tendrá menos que el que más trabaja.