Los nombres propios son aquellas palabras utilizadas para referirse a un lugar, una obra de arte, una mascota o una persona. Los nombres propios siempre empiezan con mayúscula.
De esta manera, se diferencian con los nombres comunes (o genéricos), que van en minúscula y se utilizan para nombrar cosas, lugares, criaturas, personas, etc.
Ejemplos de nombres propios
- Álan
- Alfonso
- Alicia
- Amparo
- Andrea
- Andrés
- Antonia
- Antonio
- Ariel
- Azul
- Bárbara
- Bartolomé
- Belén
- Benito
- Bruno
- Celeste
- Cherry
- Diego
- Edgardo
- Eduardo
- Elena
- Emilio
- Felicia
- Feliciano
- Fernando
- Florencia
- Gaspar
- Gerardo
- Gimenez
- Gonzalo
- Graciela
- Gustavo
- Hilda
- Isidoro
- Jacinto
- Jesús
- Jorge
- Josefina
- Juan
- Juana
- Juano
- Julia
- Julián
- Juliana
- Julio
- Leandra
- Luis
- Luisa
- Luz
- Marcelo
- Marcos
- María
- Mariano
- Martín
- Martinez
- Miguel
- Mirta
- Mónica
- Natalia
- Nicolás
- Noé
- Noelia
- Paula
- Pomponio
- Rafael
- Raquel
- Renzo
- Roberto
- Rocío
- Rodolfo
- Rodrigo
- Rodriguez
- Romina
- Rosario
- Santiago
- Silvia
- Simón
- Socorro
- Tato
- Teresa
- Tomás
- Valeria
- Verónica
- Victor
- Ximena
- Yayo
- Zulema
Nombres propios de lugares
- Alpes Suizos
- Amazonas
- Antártida
- Arabia Saudita
- Argentina
- Bali
- Bangkok
- Bolivia
- Buenos Aires
- Camboya
- Cañón del Colorado
- Chile
- Ciudad de México
- Colombia
- Cordillera de los Andes
- Delta del Mekong
- España
- Estado de Nueva York
- Europa
- Francia
- Golfo Pérsico
- Indonesia
- Inglaterra
- Irlanda
- Las Vegas
- Línea del Ecuador
- Liverpool
- Londres
- México
- Nueva York
- Paraguay
- Patagonia
- Perú
- Polo Norte
- Polo Sur
- Polonia
- Provincia de Salta
- Región Pampeana
- Rusia
- Tailandia
- Trópico de Cáncer
- Washington
Nombres propios de ciudades
- Allen
- Bangkok
- Barcelona
- Berlín
- Bogotá
- Brasilia
- Buenos Aires
- Cancún
- Caracas
- Cartagena
- Cipolletti
- El Cairo
- Lima
- Liverpool
- Londres
- Madrid
- Manila
- México DF
- New York
- París
- Playa del Cármen
- Pucón
- Quito
- Río de Janeiro
- Roma
- Rosario
- Salta
- San Francisco
- Santiago de Chile
- Toledo
Nombres propios de espacios urbanos
- El castillo de Chapultepec
- El cementerio Parque Memorial
- El estadio Azteca
- El mercado Central
- El mercado Juárez
- El museo de Arte Indígena
- El palacio de Bellas Artes
- El panteón de Belén
- El parque Alcalde
- El parque Hermandad
- El teatro Alarife
- La avenida Benito Juárez
- La calle Mar Rojo
- La calle Nicaragua
- La carretera de Colmenar
- La carretera de San Luis
- La glorieta de los Hombres Ilustres
- La glorieta Revolución
- La plaza de la Liberación
- La plaza San Pedro
Nombres propios de épocas y sucesos históricos
- El Imperio romano
- El Jurásico
- El Medievo
- El Neolítico
- El Paleolítico
- El Renacimiento
- El Siglo de Oro
- El Virreinato
- La Antigua Grecia
- La Antigüedad
- La Baja Edad Media
- La Edad de los Metales
- La Edad Media
- La Gran Depresión
- La guerra de Reforma
- La guerra del Opio
- La Ilustración
- La Revolución francesa
- La Revolución mexicana
- La Semana Trágica
Nombres propios de divinidades
- Amón
- Apolo
- Ares
- Artemisa
- Atenea
- Deméter
- Dionisio
- Hades
- Hécate
- Hefesto
- Hera
- Hermes
- Juno
- Minerva
- Odín
- Osiris
- Pan
- Perséfone
- Urano
- Zeus
Nombres propios de marcas comerciales
- Aeroméxico
- Audi
- Bancomer
- Cartier
- Coca Cola
- Corona
- Ford
- General Motors
- Harley Davidson
- Johnnie Walker
- Louis Vuitton
- Marlboro
- Nescafé
- Netflix
- Rolex
- Sanborns
- Telmex
- Toshiba
- Toyota
- Whirlpool
Nombres propios de órdenes religiosas
- Orden Basiliana del Santísimo Salvador de los Melquitas
- Orden Cisterciense de la Estricta Observancia
- Orden de Frailes Menores Capuchinos
- Orden de la Cartuja
- Orden de la Imitación de Cristo
- Orden de la Santa Cruz
- Orden de la Santísima Trinidad y de los Cautivos
- Orden de los Agustinos Descalzos
- Orden de los Agustinos Recoletos
- Orden de los Antonianos Maronitas
- Orden de los Clérigos regulares de Somasca
- Orden de los Clérigos Regulares Ministros de los Enfermos
- Orden de los Hermanos de Nuestra Señora de Bethlehem
- Orden de los Siervos de María
- Orden de Nuestra Señora de la Merced
- Orden de Predicadores
- Orden de San Agustín
- Orden de San Pablo Primer Eremita
- Orden Descalza de Nuestra Señora de la Merced
- Orden Hospitalaria de San Juan de Dios
Nombres propios de festividades
- El Año Nuevo
- El día de la Batalla de Puebla
- El día de la Candelaria
- El día de la Constitución
- El día de la Independencia
- El día de la Mujer
- El día de la Revolución
- El día de las Naciones Unidas
- El día de los Santos Inocentes
- El día de Reyes
- El día de San Valentín
- El día del Padre
- El día del Trabajador
- El Pentecostés
- El Primero de Mayo
- El Viernes Santo
- La Navidad
- La Nochebuena
- La Nochevieja
- La Primavera de Praga
Los nombres propios se utilizan para referirse a diferentes tipos de seres (vivos y no vivos). Se pueden utilizar nombres propios para diferentes categorías. A continuación se ofrecen ejemplos del uso de nombres.
- Antropónimos: el nombre o el apellido de una persona.
- Apodos personales, sobrenombres y seudónimos.
- Nombres de zonas geográficas.
- Nombres apropiados para los espacios urbanos (calles, avenidas, rotondas, plazas, etc.).
- Nombres apropiados para los objetos.
- Nombres apropiados para los animales.
- Nombres apropiados para instituciones y sociedades.
- Nombres apropiados para grupos de artistas.
- Nombres de periodos históricos.
- Nombres apropiados para los acontecimientos históricos.
- Nombres de dioses.
- Nombres apropiados para las marcas.
- Nombres apropiados para las órdenes monásticas.
- Nombres de los doce signos zodiacales.
- Nombres de los festivales.
Cabe recordar que: la regla ortográfica es que los nombres propios van en mayúsculas.
La forma plural no suele utilizarse con los nombres propios ya que con ellos se pretende designar una entidad específica que no puede escribirse en plural. Sin embargo, si el mismo nombre es utilizado por varias entidades, puede pluralizarse pero se convierte en un nombre genérico.
En este caso, no debería escribirse con mayúscula, ya que no es un nombre propio, pero a menudo lo es. He aquí un ejemplo de respuesta. Ejemplo: ‘los Carlos, las Lupitas, los Alfonsos’.
En la may.oría de los casos, los nombres propios no tienen posesivo porque el propio nombre describe el objeto al que se refiere. Sin embargo, a veces se puede añadir un artículo. En el habla coloquial, también es habitual añadir un artículo finito al nombre de una persona. Por ejemplo, «La Fernanda vino a verme ayer», «Estuve de vacaciones con el Alberto» o «Soy un buen amigo de la Sandra».
A veces los sustantivos comunes se usan en singular para referirse a algo específico. En estos casos, el nombre común puede tener las características de un nombre propio, ya que intenta identificar o distinguir a un sujeto específico.