19 Ejemplos de Derechos del Niño
Los ejemplos de derechos de los niños son leyes que aseguran a los menores de edad, recibir los mismos beneficios que un adulto digno, más otros especiales.
Por ejemplo: El derecho a la educación.
Ejemplos derechos de los niños
- Derecho a la vida, la supervivencia y desarrollo
- Derecho al descanso y el esparcimiento
- Derecho a la libertad de expresión y acceso a la información
- Derecho de participación
- Derecho a la no discriminación
- Derecho a la identidad
- Derecho a la educación
- Derecho a una vida digna
- Derecho a la salud
- Derecho a la protección
- Derecho a la igualdad
- Derecho a no trabajar
- Derecho a una alimentación adecuada
- Derecho a permanecer impunes en conflictos armados
- Derecho a tener una familia
- Derecho a ser escuchado
- Derecho a la libertad de convicciones éticas, pensamientos, religión y cultura
- Derecho a ser integrado a la sociedad cómo minoría
- Derecho de los niños y niñas con discapacidad
En el artículo 6 de la convención se establece lo siguiente: En primer lugar, los gobiernos deben reconocer el derecho de los infantes a la vida de forma intrínseca. Esto significa que al nacer ya se cuenta con él, es lo primordial salvaguardar a los más indefensos.
Por ejemplo, promoviendo los centros de adopción dónde se les cuide en caso de perder su familia.
Necesidad de brindarle al infante (niño). el tiempo necesario para el descanso de las tareas adoptadas según su edad. Pero no solo eso, igualmente los pequeños tienen el derecho al esparcimiento y más importante aún, a jugar. Por ello se debe brindar espacios recreativos destinados a su diversión.
Los parques públicos cumplen con ese derecho, de igual manera las bibliotecas públicas.
Al niño se le permitirá expresar sus ideas y serán tomadas en cuenta en la misma medida de un adulto. Esto se refiere no solo a su participación en los debates de importancia social, sino también en la esfera doméstica. Los padres deben estar atentos a la comunicación con sus hijos, escucharlos y atender a sus solicitudes cómo lo dice el artículo 13.
Una madre que pregunta a su hijo sobre su día en la escuela está poniendo en validez ese derecho.
Los menores de edad por estar en etapa de aprendizaje se les excluye de muchas actividades, sin embargo, ellos poseen el derecho de participar de algunas. Por ejemplo, las relacionadas con la cultura, el Arte, la recreación y el esparcimiento.
Las visitas a los museos en las escuelas son una manera de hacerlos partícipes de la cultura, la información y los divierte.
Es crucial garantizar que los derechos de los niños sean obtenidos por todos sin importar su color de piel, etnia, sexo, religión, discapacidad o su origen. A eso se le conoce cómo principio de no discriminación en el apartado 2 y se encarga de evitar la disminución de las oportunidades de los infantes por cualquier causa.
Permitir el estudio de niños de diferente color de piel en una misma institución, es uno de los derechos más difundidos en el mundo.
Los seres humanos al nacer tenemos el derecho de ser nombrados por nuestros padres y a preservar esa marca de identidad sin ser modificada por ningún motivo. Asimismo, el párrafo número 8 de la convención protege la nacionalidad de todo infante, de esta manera siempre conservarán la impronta de su lugar natal.
Por ese motivo un niño criado fuera de su país natal, siempre conserva los beneficios de haber nacido allí.
Uno de los más importantes corresponde a las oportunidades de acceder a la educación de calidad para los menores de edad. Por ello, el apartado número 28 se dedica a ese punto otorgándoles el derecho a recibir enseñanza de nivel primario de forma gratuita y obligatoria.
Gracias esta iniciativa, muchos países en el mundo tienen centros educativos públicos totalmente gratuitos para la primaria.
Uno de los parámetros de mayor importancia en las discusiones sobre los derechos de los infantes es la necesidad de proveerles de una vida digna. Por ello, en casi todos los apartados de la convención se señala ese punto sin tener un capítulo dedicado a él como tal.
Ofrecerles educación, salud, alimentación y seguridad a nuestros hijos es la mejor manera de darles una vida digna.
Se reconoce el derecho a obtener el más alto nivel de salubridad posible con servicios médicos adecuados al tratamiento de enfermedades y centros de rehabilitación. Por ello, junto a la educación es primordial ofrecer servicios médicos a todos los menores sin distinción de estado económico, raza, sexo y religión.
Un ejemplo de ello son las instituciones públicas dirigidas a la salud de los niños.
Los menores de edad por estar en proceso de adquirir tanto, madurez mental cómo física, requieren de protección y cuidados especiales. Por ello es necesario crear medidas legales con esa finalidad para antes y después de su nacimiento. Este derecho es uno de los que le concierne al estado porque se debe salvaguardar al niño de todo agente dañino.
Por lo tanto, una denuncia de maltrato infantil atendida es un claro ejemplo de protección al menor.
Todos los derechos aquí mencionados están regidos por una condición, la de ser aplicados a los menores de edad, sin importar sus diferencias. En el mundo de hoy los seres humanos se distinguen unos de otros por muchos motivos, posturas políticas, religión, sexo, color de piel, cultura o estatus económico.
Por ejemplo, en una situación de emergencia se les tratará prioritariamente a los niños, sin distinguir su situación económica.
Sumado al derecho al esparcimiento y al tiempo libre, existe otro que regula las actividades aptas para los niños. Se trata del derecho a no trabajar hasta llegar a la etapa de la adultez, cómo lo indica el capítulo 32. De hecho, es considerado una falta grave incluir a los infantes en cualquier labor económica si esta interrumpe sus actividades escolares y de ocio.
Un padre que lleva a su hijo al futbol en lugar de obligarlo a laborar, está cumpliendo ese beneficio.
Este comparte algunas características con el derecho a la salud, por ello está recogido en la convención en el mismo capítulo. Además, tanto los padres y representantes, como el estado se encargan de velar por los requisitos mínimos. En primer lugar, es necesario suministrarles alimentación balanceada y nutritiva.
Este derecho se cumple en el hogar cuando le aportamos a los menores alimentos ricos en nutrientes, sanos y poco procesados.
Este es uno de los más importantes y también de los primeros en ser discutidos a comienzos del siglo pasado. Con él se exige dejar fuera de las hostilidades de una guerra a los menores de edad, así cómo se debe hacer con las poblaciones civiles. Es decir, no pueden ser objeto de represalias, bombardeos, ataques ni tampoco trata de personas.
En vista de esto, se les prohíbe a los soldados en la guerra dar de baja a un niño o simplemente hacerles daño.
Este derecho acompaña al referente a la identidad, porque con base en esa relación la persona construye gran parte de su ser. Por ello, es nuestro deber darle a todo niño la posibilidad de integrar un grupo familiar, en primer lugar, protegiendo a los progenitores de ser separados de sus hijos.
Un buen ejemplo de este derecho consiste en informar sobre la planificación familiar y las necesidades que un padre debe cumplir.
Muchas veces pensamos que los más pequeños no tienen derecho de opinar sobre su condición por escasa madurez. Sin embargo, esto es un error, siempre es necesario prestar atención a sus problemas y escuchar atentamente sus opiniones.
Por ejemplo, en donde más se relacionan ellos, en la escuela. Allí se toman en consideración todas sus inquietudes y se responden.
Derechos de las minorías de niños y niñas
Las minorías deben ser protegidas y en lugar de una integración forzosa a la sociedad de su país, se necesita valorar sus diferencias. Este privilegio empieza desde la edad más temprana, por ello los niños nacidos en un grupo minoritario tienen el derecho de vivir bajo sus propias costumbres heredadas de sus ancestros.
Por ello, los descendientes de un grupo indígena tienen la posibilidad de continuar con sus tradiciones sin necesidad de ocultarla de los demás niños.
También en ese mismo artículo se señala que los infantes pertenecientes a una minoría poseen el derecho a participar activamente de la sociedad. En consecuencia, sin importar las características de su cultura, se le debe proveer de los otros beneficios aquí nombrados, cómo la posibilidad de ser educados.
Una forma de integrar, es informar a la población sobre los otros estilos de vida, tradiciones y costumbres de todos los grupos humanos de la zona.
El artículo 23 es uno de los más extensos por dedicarse a establecer los derechos de los discapacitados. En primera instancia, ellos deben tener una vida digna que les permita desarrollarse cómo ciudadanos. Aquí se refiere a la posibilidad de desenvolverse por sus propios medios y su inclusión de forma activa en la sociedad.
Las alternativas de educación para las personas sordas, mudas y ciegas son un claro ejemplo.