20 Ejemplos De Objetivos De Una Empresa: Todos Los Detalles Aquí
Antes de iniciarse, la organización debe definir los objetivos que desea alcanzar a corto, medio y largo plazo para encontrar una línea de actuación razonable. Los objetivos de una empresa destacan también importantes aspectos de la organización, como sus valores y su misión.
Los objetivos corporativos se enmarcan en el contexto de la visión y la misión de la empresa. Por lo tanto, son un factor clave para definir, diseñar y construir una organización basada en las personas.
Estos objetivos deben formularse como calidad y buen rendimiento y deben describir el funcionamiento de la organización. Sin definir los objetivos de la empresa, no es posible desarrollar una estrategia empresarial. De hecho, sin esta definición, es imposible medir el rendimiento.
Por otra parte, si los objetivos de la organización están bien definidos, es más fácil evaluar la gestión de la organización y determinar el grado de cumplimiento de sus hipótesis iniciales, así como calcular los planes estratégicos para el futuro.
Ejemplos de objetivos de una empresa
- Actualizar el diseño del logotipo de la empresa.
- Actualizar el diseño de los envases para que sean más ecológicos.
- Adquisición de nuevos equipos de producción.
- Apertura de nuevas sucursales durante el año.
- Aumentar las ventas un 10% en el próximo trimestre.
- Aumentar los pagos de salarios y prestaciones a los empleados.
- Creación de vídeos de sensibilización activa a través de los canales de televisión locales.
- Crear alianzas estratégicas con nuevos proveedores.
- Crear asociaciones con consumidores internacionales.
- Crear tácticas de fidelización de la marca.
- Crear una plataforma en línea donde puedan vender automáticamente los productos.
- Desarrollar ideas creativas para dos nuevos productos.
- Desarrollar nuevos proyectos de responsabilidad social corporativa para satisfacer las necesidades sociales de la industria.
- Desarrollar un plan de mantenimiento trimestral para todas las máquinas.
- Establecer asociaciones para talleres y eventos.
- Establecer un presupuesto mensual del 10% del presupuesto.
- Fomentar el ingenio deportivo a través de patrocinios.
- Inspección a fondo la fábrica al menos dos veces al mes.
- Promoción de los productos con anuncios innovadores en las redes sociales.
- Proporcionar formación trimestral a los empleados para garantizar que cada uno de ellos cumpla el perfil de servicio al cliente de la empresa.
¿Cuáles son los tipos de objetivos?
- En relación del periodo de tiempo, pueden dividirse los objetivos en las siguientes categorías:
Objetivos a largo plazo (estratégicos)
Se trata de objetivos para la organización en su conjunto, destinados a fijar la dirección de la misma. Suelen alcanzarse en un periodo de cinco años, pero no menos de tres. Cada objetivo estratégico requiere un conjunto de objetivos tácticos.
Objetivos a medio plazo (tácticos)
Se trata de objetivos a nivel regional o de unidad definidos en función de la funcionalidad de los objetivos estratégicos. Suelen conseguirse en un plazo de uno a tres años. Para cada objetivo táctico, hay que definir los objetivos operativos.
Objetivos a corto plazo (operativos)
Se trata de objetivos de nivel operativo vinculados a la funcionalidad de los objetivos tácticos. Suelen conseguirse en un año o menos.
- En relación de su naturaleza, pueden clasificarse los objetivos de la siguiente manera:
Objetivos generales
Son expresiones habituales. Unos ejemplos de objetivos genéricos o generales son:
- Aumentar la productividad.
- Aumento de la facturación.
- Luchar por el liderazgo en el mercado.
- Mejorar la cooperación en el mercado.
- Aumentar los activos.
- Conseguir mayores beneficios.
- Crecer.
- Sobrevivir.
- Convertirse en la marca líder del mercado.
- Convertirse en una marca conocida por su flexibilidad de diseño.
Los objetivos habituales incluyen una «apariencia empresarial«, que es el objetivo principal general que la empresa persigue.
Objetivos específicos
Son las tareas específicas necesarias para alcanzar el objetivo global, que siempre se expresa en minutos y horas. Unos ejemplos de objetivos específicos pueden ser:
- Abrir dos nuevas tiendas antes del primer semestre del próximo año.
- Adquirir tres máquinas nuevas en el tercer trimestre del año.
- Alcanzar una cuota de mercado del 20% en el segundo semestre del año.
- Acrecentar la eficiencia de la producción en un 25% para el mes próximo.
- Aumentar la producción en un 30% al año.
- Aumentar en un 20% al mes las ventas.
- Conseguir un rendimiento anual del 14% de la inversión.
- Obtener un beneficio mensual de 20.000 dólares en el próximo año.
- Triplicar la producción para finales de año.
- Vender 10.000 productos al final del primer año.
Los objetivos deben adaptarse a la situación específica.
Importancia de los objetivos
El establecimiento de objetivos es fundamental para el éxito de la organización. Muestran el camino a seguir y son una fuente de motivación para todos los miembros de la organización.
Otras razones para establecer objetivos son:
- Constituyen la base para llevar a cabo un proyecto o actividad.
- Crean colaboración, compromiso y motivación, y satisfacción cuando se alcanzan los objetivos.
- Crean sinergias.
- Crean una sensación de colaboración, organización y control.
- Establecen prioridades.
- Guían la asignación de recursos.
- Guían la planificación táctica.
- Los resultados alcanzados pueden medirse con respecto a los objetivos para evaluar la eficacia y el rendimiento de la organización. Además, de cada área, de cada equipo y de cada empleado.
- Permiten centrar nuestros esfuerzos en una dirección.
- Reducen la incertidumbre.
Características de los objetivos de la organización
Los objetivos de la organización deben alcanzarse en las siguientes condiciones:
Mensurables: Los objetivos deben ser mensurables, es decir, deben indicar lo cerca que está la organización de alcanzar el objetivo. Deben definirse con cierta precisión y especificidad, pues de lo contrario no se puede determinar si se ajustan al objetivo.
Asequibles: Un objetivo no es inalcanzable. Los objetivos que no pueden alcanzarse de forma sencilla conducen a la frustración, la decepción y la apatía de los empleados. Esto debido a que sus esfuerzos no se ven recompensados.
Deben ser claros, concisos y directos: No deben ser abstractos, vagos o más o menos claros, ya que, de lo contrario, son difíciles de comunicar y transmitir a todas las partes interesadas. Si no entiendes lo que quieres, no sabrás lo cerca que estás de tu objetivo.
No debe ser contradictorio: Aquí no hay nada contradictorio, ilógico o irracional. Tales cualidades no pueden conducir al éxito en el esfuerzo humano.
Deben suponer un reto para la organización: Deben exigir esfuerzo, crecimiento y perseverancia, pero siempre con una comprensión realista del entorno y las necesidades. De lo contrario, sólo estrías soñando.
Debe ser claro: Debe quedar claro para todos los miembros de la organización, sin excepción. Esto garantiza que los esfuerzos de los empleados se dirijan en la misma dirección.
Recomendaciones sobre el uso de objetivos
- Deben establecerse objetivos generales, pero también deben guiar el establecimiento de objetivos específicos de forma continua y coherente. Siempre deben ir acompañados de objetivos específicos, ya que establecer sólo objetivos generales puede resultar confuso. Además, puede dificultar la comprensión de la dirección que realmente se quiere tomar.
- Los objetivos deben fijarse para toda la organización, para cada departamento o división y para cada equipo. Los objetivos de cada equipo se basan en la funcionalidad de los objetivos de cada división. Mientras que, los objetivos de cada área se basan en la funcionalidad de los objetivos de la organización.
- Los objetivos no deben ser rígidos, sino lo suficientemente flexibles como para adaptarse a cambios imprevistos en un área determinada. Por ejemplo, cambios repentinos en las preferencias de los clientes, debido a nuevas tendencias de la moda.
- Los objetivos siempre deben priorizarse y aplicarse en función de su importancia y urgencia.
- Por último, los objetivos deben ser conocidos y recordados constantemente en todos los niveles de la organización.
La comunicación abierta y clara es esencial para garantizar que los objetivos se comparten en toda la organización. Esto no significa que cada departamento conozca todos los detalles, sino que todo el mundo debe saber hacia dónde va la empresa. Esto con la finalidad de trabajar de forma cohesionada y alcanzar no sólo los objetivos a corto plazo, sino también los objetivos a largo plazo.
¿Cuál es la diferencia entre objetivos y metas?
En primer lugar, una meta es lo que quieres conseguir, una meta que te gustaría alcanzar en algún momento, aunque no tengas un plazo concreto. Un ejemplo sería el número de ventas que quieres conseguir en un periodo de tiempo determinado.
Sin embargo, un objetivo es una guía o un conjunto de pasos que debes seguir para alcanzar tu meta. Volviendo al ejemplo anterior, puedes utilizar diferentes objetivos para alcanzar tus metas de marketing digital. Por ejemplo:
- Crear un plan de marketing para atraer a nuevos clientes.
- Asegurar de que el producto se presenta en todos los aspectos del marketing para que los clientes sigan utilizándolo.
- Realizar encuestas de servicio y calidad para mejorar la calidad de los productos y aumentar el consumo.
Implementar los objetivos de una empresa no es una tarea fácil. Deben ser a largo plazo, claros, realistas y con visión de futuro. Aunado a esto, deben estar alineados con la cultura, los objetivos y la visión de la organización. También deben ser claras para el personal, de modo que todos tengan una hoja de ruta para alcanzar este objetivo común.
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