Ejemplos de contaminación del agua
La contaminación del agua ocurre principalmente por:
1. Agricultura
La agricultura juega un papel importante en la contaminación del agua en todo el mundo. Todos los días, las granjas liberan grandes cantidades de materia orgánica, agroquímicos, sedimentos, residuos de medicamentos y drenaje salino en cuerpos de agua.
El nitrato de estiércol, fertilizantes, amoníaco y desechos es uno de los contaminantes más comunes que se encuentran en los acuíferos subterráneos. Estas toxinas pueden dañar a los peces y otros animales. Los nitratos también penetran en el suelo y pueden terminar en el agua potable. Si se ingieren, los desechos agrícolas pueden causar enfermedades e incluso la muerte.
2. Aguas residuales y alcantarillado
Las aguas residuales son cualquier tipo de agua que se utiliza para actividades industriales, agrícolas o comerciales. Esta también es agua que proviene de tu hogar de tus inodoros, duchas y lavabos. La escorrentía de aguas pluviales también se considera agua residual y puede transportar una variedad de aceites, sales, productos químicos, grasas y escombros que terminan en las vías fluviales.
Como la mayoría de las aguas residuales se transportan al medio ambiente y a menudo se reutilizan. Desafortunadamente, las mismas no siempre se tratan de antemano, lo que significa que ocasiona la contaminación del agua que se usa para beber y para saneamiento. Beber aguas residuales contaminadas a menudo resulta en enfermedades y dolencias como la diarrea.
3. Hidrocarburos
Todos los días, los océanos están muy contaminados con aceites derivados de derrames de petróleo, vertidos, escorrentías y envíos de rutina. De hecho, se estima que 706 millones de galones de aceite usado ingresan al océano cada año. Como el aceite no puede disolverse en agua, se convierte en un lodo espeso que daña a los peces, afecta a las aves marinas y bloquea la luz a las plantas acuáticas.
Estos aceites también pueden contaminar el agua para beber y para otros fines. Como la limpieza del aceite puede ser un proceso largo y costoso, limpiar el agua que se ha contaminado con aceite simplemente no es una opción. Esto significa que los hombres, mujeres y niños de países menos privilegiados se ven obligados a utilizar agua contaminada para beber, bañarse y cocinar.
4. Desechos radiactivos
La exposición a la radiación aumenta el riesgo de dañar las células, los tejidos y el ADN. La exposición a largo plazo puede provocar problemas graves como cánceres, defectos de nacimiento, leucemia, mutaciones genéticas y trastornos del sistema inmunológico y endocrino.
Cuando las fábricas liberan radiactividad en el aire, el suelo y el agua, puede causar estos problemas, y más en las personas que entran en contacto con los desechos radiactivos. Los desechos radiactivos también pueden durar muchos siglos, lo que hace que la limpieza sea un gran desafío. Si los mismos no se eliminan correctamente, pueden extenderse al agua subterránea y superficial.
5. Desarrollo urbano
El rápido desarrollo urbano puede tener un impacto directo en la contaminación del agua. Las fábricas suelen ser culpables de verter desechos químicos en cuerpos de agua que causan contaminación de los océanos. La escorrentía de carreteras y autopistas que están cubiertas de sustancias químicas nocivas como líquidos de frenos, combustibles derramados y emisiones de escape también se pueden lavar en ríos y lagos.
Incluso las personas comunes son responsables de la contaminación del agua. El simple hecho de verter productos químicos por el desagüe o tirar los detergentes por el inodoro puede contribuir a la contaminación del agua. A menudo, los cuerpos de agua se vuelven más contaminados a medida que pasan los años.
6. Plásticos
Hoy en día, los plásticos se utilizan en todo tipo de fabricación, desde la producción de ropa hasta las piezas de automóvil. Como el plástico es liviano, a menudo se arrastra a los ríos y océanos. Este no es biodegradable, lo que significa que puede durar décadas y presentar un peligro para los animales marinos. Los plásticos modernos también contienen sustancias químicas nocivas que pueden filtrarse en el agua con el tiempo.
Algunos tipos de plástico contienen bisfenol A (BPA), una sustancia química que puede tener efectos directos sobre la salud del cerebro y la glándula prostática de los niños, los bebés e incluso los fetos, y también puede llegar a causar cambios en el comportamiento de un infante.
7. Microbios
A diferencia de la mayoría de los demás en esta lista, la contaminación microbiológica es una forma natural de contaminación del agua. Los microorganismos como las bacterias, los protozoos y los virus pueden infiltrarse en los suministros de agua y causar enfermedades como la bilharzia y el cólera. Los seres humanos son más susceptibles a este tipo de contaminación en lugares donde aún no existen sistemas adecuados de tratamiento de agua.
8. Nutrientes
Si bien son vitales para el florecimiento de la flora y fauna submarina, un exceso de nutrientes puede alterar el delicado desequilibrio de los ecosistemas acuáticos. Los fertilizantes contienen una alta concentración de nutrientes que, si contaminan ríos, lagos y áreas costeras, pueden causar la floración de algas que bloquean la luz solar e inhiben el crecimiento de otros organismos.
9. Agotamiento de oxígeno
Otra consecuencia de la proliferación de algas es su consumo de oxígeno. Esto significa que las especies que dependen del oxígeno para sobrevivir mueren, mientras que las anaeróbicas prosperan. Algunos microorganismos anaeróbicos son capaces de producir amoníaco, sulfuros y otras toxinas dañinas, que pueden hacer que el agua sea aún más peligrosa para los animales (y también para los humanos).
10. Térmica
Cuando se produce una disminución o aumento de la temperatura en un cuerpo de agua, estamos en presencia de contaminación de la misma. Una de las principales causas de este fenómeno es el uso de este recurso como refrigerante en las centrales. Al ocurrir esto, disminuye el oxígeno, y los peces pueden morir por falta del mismo.
La contaminación del agua puede ocurrir en cualquier momento en que las sustancias tóxicas ingresen a cuerpos de agua como océanos, ríos, lagos y arroyos. A medida que los contaminantes se asientan o se disuelven en el agua, la calidad de la misma se degrada. Esto no solo es perjudicial para los ecosistemas acuáticos, sino que también puede afectar a millones de personas en todo el mundo que dependen de estos cuerpos de agua para beber, cocinar y sanearse. Conocer sobre el tema es el primer paso para reducir la contaminación.